Loading...

En aquel tiempo, el Señor dijo: «¡Ay de vosotros, porque edificáis los sepulcros de los profetas que vuestros padres mataron! Por tanto, sois testigos y estáis de acuerdo con las obras de vuestros padres; porque ellos los mataron y vosotros edificáis sus sepulcros. Por eso dijo la Sabiduría de Dios: ‘Les enviaré profetas y apóstoles, y a algunos los matarán y perseguirán’, para que se pidan cuentas a esta generación de la sangre de todos los profetas derramada desde la creación del mundo, desde la sangre de Abel hasta la sangre de Zacarías, el que pereció entre el altar y el Santuario. Sí, os aseguro que se pedirán cuentas a esta generación. ¡Ay de vosotros, los legistas, que os habéis llevado la llave de la ciencia! No entrasteis vosotros, y a los que están entrando se lo habéis impedido».

Y cuando salió de allí, comenzaron los escribas y fariseos a acosarle implacablemente y hacerle hablar de muchas cosas, buscando, con insidias, cazar alguna palabra de su boca.

Los jóvenes necesitan descubrir que llegamos a la fe a través de una comunidad eclesial que nos transmite la Palabra y nos inserta en la celebración del acontecimiento de Jesús.

Comentario: 

¿Facilitadores de la voluntad de Dios? En el enfrentamiento, duro y ácido con ciertos sectores aristocráticos de Israel, Jesús les acusa de haber silenciado la palabra de Dios, de haber suplantado, con sus propios intereses y visiones los planes de Dios que nunca fueron el establecimiento de un grupo dirigente como intérprete monopolizador de su voluntad. Sabían qué era lo que Dios quería, sabían cuáles eran sus motivaciones e intenciones y se daban el lujo de excluir y despreciar a quienes no compartían esas verdades. Y todo ¿para qué?

Dios nos reclama su propia libertad para no acabar convertido en marioneta de nuestros juicios o de nuestros prejuicios, en un pelele de nuestros caprichos o nuestros desvaríos autoritario que buscan, las más de las veces, protegernos detrás de nuestras propias construcciones que imponemos a los demás como necesarias y auténticas.